la guerra siempre es una derrota
Resumen
Que nunca se debilite el principio de humanidad como eje de nuestro actuar cotidiano. Ante la crueldad de los conflictos que afectan a civiles desarmados, atacando escuelas, hospitales y operadores humanitarios, no podemos permitirnos olvidar que lo que está en […]

Que nunca se debilite el principio de humanidad como eje de nuestro actuar cotidiano. Ante la crueldad de los conflictos que afectan a civiles desarmados, atacando escuelas, hospitales y operadores humanitarios, no podemos permitirnos olvidar que lo que está en la mira no es un mero objetivo, sino personas con un alma y una dignidad». Estas fueron las palabras del papa Francisco en el mensaje del día de Pascua, 24 horas antes de morir, respecto de la situación en Franja de Gaza.
El 17 de julio de 2025, alrededor de las 10 de la mañana (hora local), un tanque del Ejército israelí disparó contra la Parroquia Sagrada Familia, la única iglesia católica en la Ciudad de Gaza. El ataque dejó un saldo trágico: al menos tres personas muertas y nueve heridas, entre ellas el sacerdote argentino Gabriel Romanelli, quien recibió lesiones en sus piernas.
El padre Romanelli es ampliamente conocido por su compromiso con la paz entre Israel y Palestina y la ayuda humanitaria. Es una figura clave en la protección de la minoría cristiana en Gaza, integrada por tan sólo 1017 personas en una población de más de 2,3 millones de habitantes, en su mayoría musulmanes. Desde el inicio del conflicto, el sacerdote mantuvo contacto permanente con el papa Francisco, quien lo alentó a seguir brindando auxilio espiritual y material a los refugiados que se congregaban en la iglesia.
La parroquia Sagrada Familia no es sólo un templo, es un espacio de convivencia plural entre personas de distintos credos: cristianos, musulmanes y judíos. En estas horas, era el refugio para cientos de personas de distintos cultos que desesperadamente buscan vivir ante la sinrazón de la violencia. Entre ellas ancianos, mujeres embarazadas y niños que duermen hacinados en aulas convertidas en dormitorios improvisados. En los últimos meses, Cáritas Jerusalén denunció reiteradamente que la situación era crítica. Su director, el padre Raed Abusahlia, alertó: “Ayer, la amenaza se volvió especialmente grave debido a la presencia de tanques israelíes cerca del complejo de la iglesia y a los continuos ataques en las inmediaciones”. Es decir, se trataba de una zona identificada como humanitaria, donde sólo quedaban civiles y religiosos sin posibilidad de escape.

Este no es un hecho aislado. En diciembre de 2023, un francotirador israelí asesinó a una madre y a su hija dentro de la misma iglesia, un hecho que fue repudiado por el Vaticano y documentado por medios internacionales. Ambas víctimas buscaban refugio en el patio del templo. La comunidad internacional condenó entonces el uso desproporcionado de la fuerza contra centros religiosos y humanitarios.
Este bombardeo, que vuelve a golpear a esta pequeña comunidad cristiana, constituye un acto gravísimo que viola no sólo el derecho internacional humanitario, sino también los principios más elementales de respeto a la vida, la libertad religiosa y la dignidad humana.
Desde nuestro lugar, como representantes del pueblo argentino, no podemos guardar silencio frente a semejante atrocidad. Debemos alzar la voz para defender a todas las personas —cristianas o no— que hoy sufren los horrores de una guerra deshumanizante.
Qué se detenga el fuego. Qué se escuche el grito de paz de los pueblos, de la gente, de los niños. ¡La guerra siempre es una derrota! «
*Eduardo Valdés, diputado nacional
Germán Martínez, diputado nacional
Cecilia Moreau, diputada nacional
Lorena Pokoik, diputada nacional
Carolina Gaillard, diputada nacional
Ricardo Herrera, diputado nacional
Mónica Litza, diputada nacional
Hilda Aguirre, diputada nacional
Ana Ianni, diputada nacional
Blanca Osuna, diputada nacional
Jorge Araujo, diputado nacional
Mónica Macha, diputada nacional
Victoria Tolosa Paz, diputada nacional
Eugenia Alianiello, diputada nacional
Natalia Zabala Chacur, diputada nacional
Carlos Castagneto, diputado nacional
Pablo Todero, diputado nacional
Varinia Lis Marín, diputada nacional
Adolfo Bermejo, diputado nacional
Carlos Cisneros, diputado nacional
Roxana Monzón, diputada nacional
Leopoldo Moreau, diputado nacional
Carolina Yutrovic, diputada nacional
Martín Aveiro, diputado nacional