una definición tan atrapante como poco esperada « Diario La Capital de Mar del Plata

Cuando tuvieron los planteles más ricos del fútbol marplatense, a comienzos de este siglo, ganaron títulos alternativamente y nunca se cruzaron en una definición, ni siquiera en un torneo de medio término. Lejos de rivalizar, a raíz de la excelente relación que unía a sus dirigencias, colaboraron entre sí. Y Quilmes aportó con tres muy buenos jugadores (Carlos Magaña, Sergio “Paisa” Torres y Nicolás Uzquiano) a una gran campaña de Banfield en el Argentino B 2002/2003, que estuvo cerca de llegar a una final por el ascenso.

Esta vez, si bien el conjunto portuense realizó una gran campaña en los dos certámenes, pocos los hubieran ubicado en una final en los pronósticos previos. Sin embargo, lucharán mano a mano por este torneo Clausura, objetivo en sí mismo y pasaje a la gran doble final anual en la que ya espera Atlético Mar del Plata, el bicampeón del fútbol marplatense.

El estadio “José María Minella”, una vez más como sucede desde 2022, será escenario y mudo testigo de la definición de la segunda parte de la temporada este sábado a partir de las 16. Dos horas antes se disputará a modo de preliminar la final de sexta división entre Once Unidos y Alvarado. Un gran aperitivo.

Muchos aguardaban a otros equipos en este partido. Sin embargo, Banfield y Quilmes se lo ganaron a pulso. El equipo portuense pasó los octavos, tal como se preveía, frente a Boca y después aprobó un Master de “Resistencia y Penales”. Estuvo contra las cuerdas en cuartos, 0-2 abajo a los 42′ del segundo tiempo, y logró empatar y luego dejar atrás a River con los remates desde los once metros. Del mismo modo, perdía casi desde el vestuario en la semifinal ante Deportivo Norte -el gran candidato, que además lo había goleado 4 a 0 en el último enfrentamiento- y logró empatar con un “bombazo” de Lucas Leiva y así llegar nuevamente a los penales, una instancia que le sienta muy bien.

El propio Leiva -con cuatro goles de los cinco que marcó el equipo- y el arquero Emmanuel Salvini, héroe en las dos últimas definiciones, fueron los grandes nombres propios de esta clasificación a la final.

Si Banfield, por eso de ir por la llave de Deportivo Norte, no era el equipo a batir en estos play-off, Quilmes destrozó todos los pronósticos previos. No era favorito con Cadetes y le ganó 3-0 con notable autoridad. Mucho menos cuando debió cruzarse en cuartos con el bicampeón Atlético Mar del Plata, al que golpeó en frío para luego llegar a los penales salvadores. Tampoco lo era en las semifinales frente a San Isidro y toda su experiencia: sin embargo, volvió a hacer gala de su solidez y una vez que marcó el primer gol se reveló como un equipo peligrosísimo si le dan espacios. A diferencia de Banfield, no tuvo nombres excluyentes para llegar a esta final.

Lo suyo fue la fortaleza del bloque y eso vuelve más peligroso al equipo conducido por Sebastián Cano, de gran debut en la Liga Marplatense.

Pero Matías López, el DT de Banfield, acaso sea el gran nombre de la previa. Puso su aporte para darle un plus a un equipo que ya había insinuado cosas interesantes en 2024. Del mismo modo, algo suyo hay en este Quilmes, al que había dirigido en las dos temporadas anteriores. Su impronta estará en los dos equipos.

Precisamente, López deberá realizar una variante obligada en relación al equipo que eliminó a Deportivo Norte. Matías Rodríguez ingresará por Nahuel Pájaro, expulsado por doble amonestación en el citado cotejo.

Sebastián Cano, el DT quilmeño, también deberá realizar una modificación. Ezequiel Tarabini también vio la “roja” en la semifinal con San Isidro y Valentín Soto se perfila para reemplazarlo. Tampoco estará Nahuel Simón, quien sufrió una fractura en el choque ante San Isidro. Lo sustituirá el pibe Juan Arenas, de muy buen ingreso frente a los “celestes”.

Noventa minutos, más una eventual tanda de penales, separan a ambos de un logro importante en sí mismo. La última vez que Banfield festejó en un torneo de medio término fue en 2016; Quilmes lo hizo en 2008, temporada en la que además ganó la final anual. Una vuelta olímpica, en consecuencia, vale mucho. Ya habrá tiempo para enfocarse en la doble final posterior.

Formaciones

Quilmes

Manuel Puente; Madeo, Bruno Vallejo y Valentín Soto; Benjamín Vallejo, Bellocq, Agustín Cejas y Juan Arenas; Restovich; Brandon Vargas y Lobasso. DT: Sebastián Cano.

Banfield

Emanuel Salvini; Hernán Zubillaga, Dafinis, Asención y Contrera; Matías Rodríguez, Tomás Giménez, Mackencie y Kulsgaard; Lucas Leiva y Collazo. DT: Matías López.

Cancha: Estadio “José María Minella”.
Árbitro: Ariel Mustafá.
Hora: 16.